Soy monotemático, Leipzig sigue imponiéndose en mi cabeza y en mis movimientos, todavía muy lentos.
La primera semana me llamaba mucho la atención que en las obras que veía en mi barrio o por la ciudad, no había grúas, solamente andamios.
En Lepzig no se construye apenas obra nueva, el modelo que se ha impuesto es la restauración de los inmuebles a través de un proceso especulativo, llevado a cabo no por los propios ciudadanos de Leipzig, sino por sus compatriotas del oeste, más ricos y pudientes.
Leipzig y Dresde, la capital de Sajonia, sufren todavía las secuelas de la reunificación de
Alemania, Ursula me leía una noticia para mi muy importante, cada año abandonan Sajonia unas diez mil personas, entre ellas sobre todo los más jóvenes y mejor cualificados, en busca de mayores y mejores opciones laborales.
Inmuebles y manzanas enteras vacías, ciudadanos con sueldos bajos comparados con el oeste, aquí la hora se paga a seis euros en un
trabajo no cualificado, en el oeste el doble. La ocasión se presenta como una jugada perfecta para el que tiene el capital suficiente para invertir, puede conseguir inmuebles enormes a bajo coste.Una vez adquirido el inmueble tiene dos opciones, mantenerlo cerrado y esperar el momento oportuno y se revalorice, o invertir en una reforma y alquilar el inmueble.
Este cambio de manos de los inmuebles está produciendo una subida de los mismos tanto en el alquiler como en la venta, lo que está vetando la posibilidad de acceder a una vivienda a un precio razonable a los ciudadanos.
Alemanes de segunda, si parece que sea cierto. Bares para alemanes en exclusiva , si, en mi barrio hay varios. La ciudad se me presenta en una crisis social después de tres semanas viviendo en ella, y hacer un análisis muy superficial. Cual es la opinión de los ciudadanos la desconozco, si sigo avanzando en el idioma pronto la podré preguntar.
p.d. las grúas que se ven en la segunda foto pertenecen a una obra pública de metro, son las únicas que he visto por ahora.
